Death of a turkey.

Mis padres, ambos profesionales de la medicina han tenido a través de los años una gama de pacientes muy diferentes. Desde ricos, peloteros, celebridades hasta el más pobre y campesino de lugares tan remotos que la mayoría de nosotros nunca conoceremos.

Estos últimos son los más interesantes, puesto que debido a su poco ingreso económico como campesinos la mayoría de las veces no cuentan con al solvencia económica para pagar los servicios de una clínica privada, pero mis padres igual siempre han atendido a este tipo de paciente a cambia de lo que puedan dar y muchas veces sin cobrar nada o solo los medicamentos. Aquí es donde se complica. Estos pacientes se sienten tan agradecidos que buscan la manera de "pagar" esta ayuda o favor con su materia prima: el campo.

El pasar de los años me ha permitido presenciar regalos tales como cerdos, gallinas, gallos, sacos de víveres, langostas, pescados, cangrejos, semillas para sembrar, perros, gatos, palomas, en fin, todo menos un mono.

Mi preferido de todos los regalos fue el pavo.

Durante una navidad un paciente llegó a la clínica con un pavo, si un pavo de los grandotes, lo llevaba amarrado al cuello tal cual un perro siendo paseado. El pavo fue llevado a la casa donde hizo del una mitad del patio su casa, y digo una mitad del patio porque del otro lado estaba mi pitbull, un ser no muy amigable hacia las aves llamado Cuco (1991-2004) que al verlo de lejos comenzó a saborearlo instantáneamente.

Llegué de la universidad y encontré un pavo cantando en mi casa. El canto de un pavo es muy peculiar, a mi me causa risa siempre, osea, que ya saben yo estoy muerto de risa, no es usual que en la cas donde vivas tengan un pavo en el patio. Para mi fue toda una cura hasta la noche, donde le pavo se pasaba toda la madrugada cantando, y como quiera en la mañana estábamos todos muerto de risa porque es tan inusual decir: "no dormí nada porque el pavo no se calló la noche entera!" que risa.

Mi hermano mayor llegó de Costa Rica (donde estudiaba y vivió por años) lo fui a buscar al AILA muy emocionado, tenía un años si verlo, osea, de inmediatamente se comenzó a beber cerveza y a hacer los cuentos de lugar, en la carretera le informo que le tengo una sorpresa en el patio de la casa.

Al llegar a casa muchos besos y abrazos para el, y no tenía 15 minutos en casa cuando e pavo se hizo sentir presente con su canto, mi hermano me mira y dice "ustedes tienen un pavo en el patio?" risas y más risas.

Al tercer día de mi hermano haber llegado ya nadie se ríe. El pavo no deja dormir a nadie, no se calla la fuckin' boca desde las 1 am hasta las 7am, NON STOP. Ya estamos peleando con mi padre que lo defiende junto a la señora del servicio que mínimo era activista en contra el maltrato de los animales. Se armó una discusión fuerte a eso de las 3pm y decidimos mi hermano y yo irnos para la calle. Era diciembre, todos de vacaciones, lógicamente compramos mucha bebida y nos fuimos por ahí.

Volvimos a casa a eso de las 2:30 de la mañana, y yo no diría que borrachos, más bien en un estupor alcohólico resultado de tomar whisky durante aproximadamente 12 horas. Duramos un buen rato para abrir la puerta, finalmente entramos a la casa y procedemos a subir la escalera, cuando vamos por mitad el señor pavo tira su canto a todo pulmón. Alci y yo nos miramos fijamente a los ojos y acertamos con la cabeza.

Bajamos la escalera, entramos a la cocina, Alci tomó un cuchillo grandísimo y yo una mandarria de esas para golpear la carne o fue tal vez el mango de un pilón, no recuerdo. Tomé la llave par abrir la puerta hacia el patio, el pavo grita cada vez más duro como avisando que íbamos a terminar con el, yo tratando de abrir la puerta con las 1.500 llaves que hay en el llavero de la casa (o por lo menos así se sintió) cuando de repente sale de su habitación Juliana, la señora de servicio asustada y con un despeine olímpico y nos pregunta: "Que pasa?" y yo con mi lengua más que estropajosa le contesto: "Oh, como que que? que vamo a matá el pavo doña" Juliana brincó como una super héroe y se puso frente a mi bloqueando la puerta del patio: "Hay que pasarme por arriba primero!" Alci con el cuchillo en la mano me mira como diciendo "que vaina vamo a tener que puyar a la doña!" yo le rogué y en mi borrachera le quise explicar el porque era conveniente el asesinato (como lo dije en el momento) del pavo.

Luego de un buen forcejeo Juliana protegió con su propio cuerpo la vida del pavo y desistimos. Muy molestos nos fuimos a dormir y caímos seguido en un profundo sueño.

Al día siguiente me levanto con una resaca digna del abuso alcohólico que nos propiciamos en día anterior. Inmediatamente levanto a mi hermano y le digo, "men, el pavo entendió, no hizo bulla anoche!" mi hermano se ríe y dice: "y eso que se salvó a chepa" bajamos a desayunar algo y es un silencio total, sonrientes llegamos a la cocina y vemos a Juliana y antes de que me fuera a disculpar le digo: "Usted ve, el pavo entendió y se calló" ella responde: "Si, entendió tanto que empacó y se fue!". El pavo se había escapado corriendo de nosotros supongo, nadie sabe como diablos se voló la pared del patio hacia la calle.

Mis padres no entendía lo que había pasado, yo le pedí a Juliana discreción y así lo hizo.

El día entero me lo pasé con el pavo en al cabeza.

La casa de mis padres está muy cerca a la UASD del lado de la José Contreras. Y les cuento esto para que entiendan el final.

A eso de las 5pm llamo a un amigo que vive cerca del oncológico ubicado al lado de la UASD que da hacia la Correa y Cidrón, y esta fue la llamada:

WALDO: Hey Jorgy, nos juntamo donde?
JORGY: E, no se, tamo medio eplotao de anoche. Le dimo duro.
WALDO: Ah bueno
JORGY: Y que hiciste anoche después que nos separamo?
WALDO: Vine pa casa, lo tiguere taban jugando domino y me quedé ahí.
JORGY: Ah, ok
WALDO: Ahora tu no me vas a creer lo que pasó anoche.
JORGY: que fue?
WALDO: Loco y tamo ahí jugando y bebiendo cuando de repente, oh! y no apareció un jodio pavo en le medio de la calle!
JORGY: Un pavo!?
WALDO: Si men! te lo juro, un pavo en el medio de la calle, cantando durísimo! jajajajajaja
JORGY: Eh, y como era el pavo
WALDO: Cómo así? que se yo, un pavo men.
JORGY: Y entonce que pasó con el pavo
WALDO: Cómo que que paso con el pavo? lo agarramo, lo matamo y no lo comimo hoy.
JORGY:...
WALDO: Alo?
JORGY: Tu maldita madre Waldo! ese era mi pavo men!! coño! nooooo!

Ahí cerré el teléfono y le dije con los ojos aguados a mi hermano, "men, lo tigre encontran el pavo y le dieron pa abajo"

El jumo navideño de ese día fue a nombre del pavo.

Esto ocurrio hace 10 años. Esta es la fecha que no he vuelto a comer pavo.

Lo siento mucho pavo, peor estabamos quemao quemao ese día.

Tengo en mi cabeza la imagen de ese pavo cruzando la UASD a las 3 AM. Digno de una película.

Long live the pavo!!!!!